Descrición

En la carretera citada anteriormente un kilómetro más adelante de la calera, con la carretera paralela al ferrocarril, hay un cruce a la izquierda con un estrecho paso bajo la vía. Si al salir de este giramos a la izquierda y posteriormente a la derecha llegamos a los restos de una mina de oro de edad romana. En realidad la explotación fue mucho más extensa, pero en este punto podemos ver con claridad varias murias, amontonamientos alargados de cantos redondeados de tamaño decimétrico. Los mineros romanos lavaban en el río las arenas de la zona para extraer pepitas de oro. Dejaban atrás en montones estas rocas para moverlas lo menos posible. La minería romana de oro fue muy extensa en todo el valle del río Sil.

Autor
Eduardo González Clavijo