Interés geológico

Este nuevo afloramiento de los esquistos permite conocer un poco más sobre los minerales que los constituyen. Además de las micas en estos esquistos son muy frecuentes los granates y las estaurolitas. Los granates son minerales de aspecto granular, de color rojizo y que en ocasiones están bien cristalizados. Por su parte, las estaurolitas son minerales prismáticos de color parduzco-amarillento, se encuentran en cristales individuales o en grupos, éstos últimos formando lo que en geología se llaman maclas.

Este corte de la carretera de Bustelos permite contemplar un excelente conjunto de pliegues desarrollados en los esquistos de esta parte del Dominio Esquistoso. Los pliegues son estructuras geológicas resultado de la alta deformación a la que fueron sometidas estas rocas cuando se encontraban a varias decenas de kilómetros de profundidad. Dado que los esquistos son rocas con un alto contenido en micas, mineral laminar y muy flexible, esto ha facilitado en gran medida el desarrollo de este intenso plegamiento.

En los pequeños y escasos afloramientos de esta parada todavía es posible observar la presencia de diques de pegmatitas, de aspecto blanquecino, y que cortan a los esquistos. Las pegmatitas son rocas magmáticas que se caracterizan por mostrar minerales en forma de grandes cristales, pero en este lugar lo realmente significativo es la presencia de espodumena, un mineral fuente de litio y bastante abundante en estas pegmatitas.

En esta parte del curso fluvial del río Deza afloran esquistos, unos materiales con una estructura en capas que ha facilitado que durante su erosión se formaran pequeñas cavidades en el macizo rocoso, y relativamente abundantes en este punto de recorrido. Los esquistos son rocas originadas a partir de antiguos materiales sedimentarios que por efecto de un incremento en la presión y la temperatura adquiere ese aspecto.

Aunque no es muy habitual en O Galiñeiro, en este punto pueden contemplar varios diques de pegmatitas, rocas semejantes en origen a las observadas en la Mina Santa Marina, pero aquí cortan a los ortogneises. A veces es posible ver en ellas bandeados composicionales o grandes cristales de feldespato.

Desde lo alto de Galiñeiro Sur o también conocida como “Lomba da Zorra” se tiene una excepcional vista panorámica de toda la Serra do Galiñeiro, Val Miñor, valle del río Louro, ría de Vigo y norte de Portugal entre otros lugares. Así mismo existen varios ejemplos de erosión por gelifracción, es decir, la fracturación producida por la congelación de agua. Un proceso que fue más intenso durante de la última glaciación, hace aproximadamente 50.000 años, y que en estas montañas se ve en forma de canchales o acumulaciones de rocas sueltas.

Las cumbres del norte de la Serra do Galiñeiro están separadas de Galiñeiro Sur por un collado que es donde se ubica esta parada. El origen de esta pequeña depresión es la presencia de una importante fractura que corta no sólo a los ortogneises sino también a los paragneises y granitos. El origen de este tipo de estructuras geológicas está en la deformación que sufren las rocas cuando son sometidas a movimientos distensivos, en este caso hace entre 300 y 280 millones de años.

La línea que definen las cumbres de la Serra do Galiñeiro es en realidad una gran estructura geológica que se denomina pliegue, es decir, una forma curva que se extiende desde As Gallas hasta la Ermida Virxe das Neves, pasado por Galiñeiro Sur. Y es precisamente aquí, a los pies de Galiñeiro Sur, desde donde se puede contemplar el cierre de ese gran pliegue. Un pliegue con más de 350 millones de años de antigüedad, resultado de la intensa deformación que generó la colisión entre dos antiguos continentes, Laurusia y Gondwana.