Quizás desde un punto de vista geomorfológico la costa oeste de Cabo Ortegal es el elemento más interesante. Marca el momento de la individualización de la Península Ibérica del resto del Mundo.
En Ortegal es donde se conserva el borde costero más intacto de toda la costa gallega, al no estar afectado por ninguna ría (como en cambio ocurre al sur en la Ría de Cedeira y al Norte en la Ría de Ortigueira). Desde la parte más alta de la Sierra de Ortegal, uno de los acantilados más altos de Europa solo superado por el Monte Pindo y Barbanza, más al sur de Galicia se puede imaginar el momento en el que se fragmentó Pangea y comenzó a alejarse América del Norte de Europa.
Mapa geomorfológico de cabo Ortegal y Santo André de Teixido mostrando la secuencia de deslizamiento circulares que constituyen el relieve actual del valle.
En Illa Redonda buenos afloramientos de la litología de la Unidad de Betanzos, serie monótona de metasedimentos siliciclásticos comunes a toda la Unidad de Betanzos esencialmente secuencias grauváquicas cámbricas. Comprobaremos las evidentes huellas de deformación (pliegues y segregados de cuarzo), visibles en la parte más externa de la estructura sinformal reconocible en la zona.
Situado en las inmediaciones de la Playa de Santa Cruz, hay buenos afloramientos de un depósito aluvial de hace 59.000 años. La terraza que allí vemos suponen un buen ejemplo del tipo de sedimentación que se dio en la Cuenca del Mero y Ría de Coruña durante la última fase glacial pleistocena, cuando el nivel del mar estaba hasta 120 metros más bajo que en la actualidad.
Buenos afloramientos de la litología de la Unidad de Betanzos, serie monótona de metasedimentos siliciclásticos comunes a toda la Unidad de Betanzos esencialmente secuencias grauváquicas cámbricas. Comprobaremos las evidentes huellas de deformación (pliegues y segregados de cuarzo), visibles en la parte más externa de la estructura sinformal reconocible en la zona. En las Islas de San Pedro, frente a O Portiño existen buenos afloramientos de estas rocas.
Se trata de una forma de relieve muy especial. De una forma general (ver mapa geomorfológico, pues está constituido por un conjunto escalonado de hasta cinco deslizamientos circulares. Dado que el frente del deslizamiento penetra ligeramente en el mar dando una forma convexa, se puede decir que este deslizamiento ha sido de desarrollo reciente como lo confirman también los procesos de creep activos y visibles tanto en los materiales geológicos como en la deformación de los troncos de los árboles de mayor envergadura.
