Volframio, Estaño

Subiendo por la pista que sale de la parte izquierda del edificio de compresores, que lleva hasta A Fiosa, aflora al inicio, en una pequeña excavación, un granito de dos micas muy alterado, similar al que se puede observar en estado más fresco intruyendo en esquistos micáceos en el punto 25, donde presenta zonas pegmatíticas. En el entorno del punto 26 afloran rocas graníticas ricas en feldespatos.

Subiendo por la pista que sale de la parte izquierda del edificio de compresores, que lleva hasta A Fiosa, aflora al inicio, en una pequeña excavación, un granito de dos micas muy alterado, similar al que se puede observar en estado más fresco intruyendo en esquistos micáceos en el punto 25, donde presenta zonas pegmatíticas. En el entorno del punto 26 afloran rocas graníticas ricas en feldespatos.

Se conserva sin modificaciones.

Subiendo por la pista que sale de la parte izquierda del edificio de compresores, que lleva hasta A Fiosa, aflora al inicio, en una pequeña excavación, un granito de dos micas muy alterado, similar al que se puede observar en estado más fresco intruyendo en esquistos micáceos en el punto 25, donde presenta zonas pegmatíticas. En el entorno del punto 26 afloran rocas graníticas ricas en feldespatos.

Al lado de la esquina nororiental del Centro de Interpretación, había un edificio, con tejado a dos aguas y de una sola planta, donde se instalaban los “aventureros” o “mineros del monte” que buscaban el mineral por su cuenta con permiso de la empresa concesionaria y se lo vendían a un precio fijado de antemano. Fue demolido durante la puesta en valor del poblado.

todavía en uso.

Desde el punto 12 se regresa por las escaleras, para observar los restos del antiguo cuartel o vivienda de los mineros, construido con granitos, esquistos y paragneises del entorno. En la parte de atrás, desde la primera planta, hay unas salidas por pasarela a la ladera inmediata en la que se ubicaban las letrinas.

Habilitado en el lugar que ocupaba una pequeña construcción auxiliar.