Bocamina escavada en un granito muy alterado, que casi se deshace con la mano. Se trata de una galería muy corta, de menos de 10 metros. Se desconoce el porqué de su existencia, pero pudo tratarse de una cata, de una prueba fallida de hacer una galería, ya que en la parte superior podemos observar una vena de cuarzo con la dirección noreste-suroeste.
Vena de cuarzo de anchura centimétrica y rodeados de óxidos de hierro sobre la bocamina. La bocamina está tapiada por motivos de seguridad.
En la siguiente curva a la izquierda de la pista se encuentra el contacto entre el granito y los esquistos de las Capas de los Montes. En esta zona hay muchos diques de cuarzo, tanto en el granito como en los esquistos, y en sus bordes se observan minerales negros, se trata de la wolframita (wolframato de hierro y magnesio).
Wolframita concentrada en el borde de un dique de cuarzo.
Después de ascender entre escombreras se llega a esta bocamina parcialmente tapada por escombros y vegetación. Desde la escombrera que hay frente a ella, además de un paisaje espectacular, se ve gran parte de zona minera. Toda la ladera presenta escombreras, llegó a haber 7 galerías. Los diques de cuarzo mineralizados llegan a tener hasta un kilómetro de longitud y 50 centímetros de anchura.
Se encuentra la casa de dirección y la casa de los empleados. Se observa el valle del río Xares, el cual presenta la característica forma en artesa de los valles moldeados por glaciares. Durante la última glaciación (hace 30000 años) por este valle descendía un glaciar de unos 170 metros de espesor de hielo.
La línea roja indica el nivel que alcanzó la morrena (sedimentos de glaciar) en el lado opuesto del valle. Detrás de la morrena se generó un lago en el cual se depositaron sedimentos finos, que son los prados que vemos de color verde claro.
Continuando por la pista 500 metros se llega a una zona con bloques de rocas. Su litología varía: granitos de diferentes tipos, neises de grano fino y neises de grano grueso (con grandes cristales blancos). Dan la sensación de estar "tirados" sobre la ladera. Son bloques erráticos, rocas de diferentes orígenes y que proceden de diferentes lugares valle arriba que fueron transportados por el glaciar que cubría el valle y que, al derretirse, quedaron al azar sobre la ladera.
Bloque de la zona con los diferentes tipos de roca. Se puede ver como valle arriba de la zona de los bloques erráticos están presentes la litologías que encontramos en estos bloques: neis, cuarcita, granito. Por lo tanto se puede ver como el glaciar arrancó estos bloques de roca de zonas más altas de valle y los depositó en esta zona. Modificado del Geode del IGME.
Llegando a la explanada donde se encuentran los edificios de la mina, la primera construcción a la izquierda era el comedor y el economato. Detrás de él se encuentra la boca de la mina "José Antonio", tapada con escombros que impiden ver el arco de piedra que tenía en su entrada.
La historia de la mina comienza en 1909. Siempre estuvo relacionada con la familia Conde, aunque en alguna época fue gestionada por belgas y posteriormente por alemanes. La mayor producción coincidió con la Segunda Guerra Mundial y el alto precio del wolframio en esa época, utilizado para fabricar armamento. La actividad cesó definitivamente en 1952.
En el punto final de la ruta, en la zona conocida como o Porral, a la derecha de la pista vemos una llanura, y entre ella y el valle del río Xares vemos una colina de unos 10 metros. Es una morrena lateral, los materiales que el glaciar arrancó, transportó y dejó en su borde derecho.
La morrena cierra un pequeño valle, por lo que hace miles de años embalsó un lago que posteriormente se colmató de sedimentos (el pastizal que está delante de la morrena).