Punto de partida y final del recorrido, en A Trigueira. En estas casas (Figs. 1 y 2) vivían los obreros de las minas. Han sido rehabilitadas como apartamentos de turismo rural. Parecen mantener la estructura y aspecto exterior. Están hechas con mampostería colocada en seco, sin aparente trabazón en el exterior. Son tres edificios adosados, con tejado a dos aguas. La longitud total del conjunto es de unos 45 m y su anchura de unos 5 m. De la parte sur de estas casas y ladera abajo, se ha habilitado una senda con baranda de madera. Bajando un poco se llega a un camino en cota, en el que se ven las marcas de surcos, de hasta 5 cm de profundidad (Fig. 3), en los esquistos, producidas por los carros de tracción animal. Este camino acaba en una zona minada, donde hay un depósito de agua (Fig. 4).