Cueva Cancelo (Eirós)

Cova Eirós es uno de los mejores yacimientos paleontológicos cuaternarios que existen en Galicia. Originalmente fue una osera, cueva refugio del oso de las cavernas. El yacimiento paleontológico fue descubierto en 1983 por Juan Ramón Vidal Romaní acompañado del espeleólogo Manuel Díaz. Se trata de la primera osera gallega estudiada científicamente por Aurora Grandal d’Anglade en 1993. El resultado de su trabajo demostró que era un yacimiento de oso de las cavernas, el más occidental de Europa y en el que fueron estudiados casi 40 individuos y más del doble de crías. Gracias a las dataciones por radiocarbono se sabe que la ocupación de Eirós tuvo lugar entre 44000 años e 28900 años antes de ahora. Es decir, existió durante 15000 años una ocupación continuada de la cueva por esta especie (Ursus spelaeus) como demuestra la disposición de los restos óseos encontrados, donde las piezas de los esqueletos quedaron “in situ”.

Excavaciones en Eirós en 1992-93

Excavaciones en Eirós en 1992-93.

Otra prueba de que la cueva es una osera son los numerosos arañazos existentes en sus paredes. No es la única cueva de este tipo existente en la Serra do Courel, donde existen otras como Rebolal, A Ceza, Liñares e Arcoia. Galicia entre 60.000 años e 15.000 años antes de ahora fue afectada por una glaciación que cubrió de hielo las áreas montañosas situadas por encima de los 1000 metros.

Situación de la principales cuevas existentes en la zona de O Courel.

Courel, Ancares, Manzaneda, Xurés-Gerez, A Peneda, Teleno y Enciña da Lastra estuvieron cubiertas por glaciares que pese a ser pequeños (máximo 65 km2 de superficie), indujeron migraciones de fauna y modificaron la cubierta vegetal.

Cuadro cronológico para los últimos 60.000 años en Galicia con especial referencia a los yacimientos paleontológicos en la zona de O Courel.

En el caso de O Courel. la cueva de Cancelo (Eirós) se ha formado en una caliza magnesífera. Durante el Paleógeno (entre 65 y 35 millones de antigüedad), se desarrollaron cuevas como la de Eirós que durante el Cuaternario se convirtieron en el refugio no solo del oso de las cavernas, sino también del oso pardo. Durante la última glaciación ambas especies de osos abandonaron todas las cuevas de O Courel, menos las situadas en las cotas inferiores.

Los restos humanos más antiguos que se han encontrado en O Courel no sobrepasan los 10.000 años de antigüedad (cueva Chan do Lindeiro), aunque también hay restos humanos mas modernos en otras cuevas de la zona: A Braña Arintero (7800 años), Rebolal (5500 años), Valdavara (5000 e 3500 años), Eirós (3390 años) e Arcoia (125 años). En el Museo Geológico de Quiroga puede verse toda esta historia que aparece en la Cueva Eirós mucho más detallada.